sábado, 28 de julio de 2018

El restaurante II: La pedida

Duclack: - ¿Ya ha cenado Pradito? 
Sebastián: - Sí, todo controlado...
Sebastián: - Estuvo jugando en su cuarto...
Sebastián: - Después se ha tomado la tortilla con ketchup y se ha quedado dormida en el sofá.
Duclack: - Al final le has hecho tortilla. No ha querido las judías verdes con jamón que sobraron. Haz que se lave los dientes antes de ir a la cama... Sí, sí... Sé que podéis apañaros perfectamente sin mí. Claro que confío plenamente en ti pero no puedo evitar estar aquí y allí a la vez...
Teo: - ¿Todo bien?
Duclack: - Sí. 
Teo: - Nos han traído ya el segundo.
Duclack: - Pero si aún no me había terminado la ensalada...
Melani: - Si quieres, ¿podemos compartir los postres, cuchicuchi?
Bartolo: - Mmmm... Ñam... Ñam... Sí, ahora te cojo un poco...
Duclack: - El salmón está demasiado poco hecho y a mí no me han puesto pan.
Teo: - Pues el sushi está perfecto... ñam..ñam.
Duclack: - Perdona, ¿pero me podría traer pan? Y el pescado está casi crudo, ¿podrían pasarlo en la sartén? Me gusta bien hecho...
Camarera: - Lo siento pero la cocina ya ha cerrado. Se ha ido la cocinera. Ahora le traigo el pan.
Teo: - Y más vino, por favor... Ñam... Ñam...
Camarera: - Su pan y su vino... (Al oído de Teo) Ya casi están preparados. En los postres salen.
Duclack: - ¿Qué te ha dicho esa camarera al oído?
Teo: - ¿Eh? Nada... Le habré gustado.
Melani: - ¿Podemos ir a dar un paseo por el puerto? Me encanta pasear junto al mar viendo las estrellas.
Bartolo: - Mejor vamos al hotel directamente.
Teo: - No te has comido más que el pan solo. Con lo que engorda el pan...
Duclack: - No me gusta el pescado crudo...
Teo: - ¿Pedimos el postre?
Duclack: - Sí... Será lo mejor...
Camarera: - ¡Qué aproveche el postre! La botella de agua, ¿para quién era?
Duclack: - Para mí.
Teo: - ¡Qué vergüenza! ¡Cómo se te ocurre pedir agua en un restaurante!
Duclack: - Pues... ¿Por qué tengo sed?
Teo: - Pero puedes pedir un refresco, cerveza, vino... Cualquier cosa menos agua... Yo jamás he pedido agua cuando salgo. Me muero de la vergüenza... La próxima vez no la pidas delante de mí, por favor.
Duclack: - Al menos el chocolate está delicioso...
Teo: - Te encanta el dulce... Yo intento no pasarme con él. Me gusta cuidarme. Me ha costado mucho conseguir esta figura. Antes pesaba un montón pero decidí cambiar y desde entonces mira cómo estoy. Yo creo que estupendo. ¿Has visto cómo me miraba la camarera? Mañana tengo cita para la depilación láser, cuando vayamos a la playa luciré un cuerpo sin un pelo. Te recomiendo que te la hagas. No es tan caro y compensa.
Duclack: - ¿Y esos mariachis?
Suenan las guitarras. Los mariachis tocan la canción Me gustas mucho de Rocío Durcal.
Yo no he perdido la esperanza
De tenerte entre mis brazos
Y ese día ha de llegar
Desde hace mucho que me gustas
Y lo que me gusta obtengo
Con toda seguridad...


Me gustas mucho, me gustas mucho tú
Tarde o temprano seré tuyo y mía tú serás
Me gustas mucho, me gustas mucho tú
Tarde o temprano seré tuyo y mía tú serás
Duclack:- ¡Dios mío! ¿Vienen para acá?... No puede ser...
Cambian de canción. Tocan Si nos dejan de Luis Miguel.
Si nos dejan
Nos vamos a querer toda la vida
Si nos dejan
Nos vamos a vivir a un mundo nuevo
Yo creo podemos ver
El nuevo amanecer
De un nuevo día
Yo pienso que tú y yo 
Podemos ser felices todavía
Si nos dejan
Buscamos un rincón cerca del cielo
Si nos dejan
Haremos con las nubes terciopelo
Y ahí juntitos los dos
Cerquita de Dios
Será lo que soñamos
Si nos dejan
Te llevo de la mano corazón
Y ahí nos vamos
Mariachi: - ¡Yajjjjjja! Está canción va dedicada a Duclack de su enamorado Teo.
Duclack: - (¡Tierra trágame!)
Si nos dejan
De todo lo demás se los olvidamos
Si nos dejan
Si nos dejan
Mariachi: - Y ahora pido a todos el restaurante unos minutos de silencio, pues mi compadre Teo, tiene algo muy importante que decir a su chica...
Mariachi: - Adelante, compadre, suéltelo yaaaa...
Teo: - Ejem... Un momento que me aclare la voz... Estoy temblando...
Mariachi: - Súbaseeee a la silla que lo vean todos bien y écheleeeee un par de wevosss, compadre...
Teo: - Duclack, yo... sé que no llevamos mucho tiempo saliendo. Pero son casi seis meses desde que te conozco. Luego te invité a pasar la Nochevieja juntos y desde entonces han sido muchos momentos. Para mí todo este tiempo que he tenido la suerte de conocerte ha sido tiempo suficiente para darme cuenta de que eres la clack de mi vida. Los dos somos dos espíritus libres. Nos gusta viajar y vivir aventuras. Me gustaría ir en tu barco por todo el mundo y despertar contigo cada día, por eso hoy te quiero proponer algo que nunca antes había hecho con una clack. Duclack Karó, ¿quieres casarte conmigo?
Mariachi: - ¿Qué tiene que contestar a eso?
Ringggg ringggggg
Duclack: - ¡Huy! ¡Teléfono...!
Duclack: - Disculpad, un momentito... ¿Sí? ¿Cómo?
Comensal del restaurante: - ¿Y ahora se pone a hablar por teléfono?
Camarera: - ¡Madre mía, qué oportuno!
Otro comensal: - Esta le dice que no...
Camarera: - Pues yo me derretiría si alguien hace eso por mí...
Otro comensal: - Pues el chico está bastante bueno...
Otro comensal: -¡Oye, guapo, te fijas en otros en toda mi cara!
Comensal: - ¡Huy, sí! Pero es verdad que está bastante bueno... A ver si tomas nota y me sorprendes un día igual...
Camarera: - ¡Queremos una respuesta!
Camarera: - ¿Será su amante con el que habla? Parece nerviosa...
Sumiller: - ¡Dile que sí!
Todo el restaurante:- ¡Dile que sí! ¡DILE QUE SÍ! ¡¡¡DILE QUE SÍ!!!
Duclack: - ¿Pero está bien? ¡Ay, no te oigo bien! Sí, está gritando todo el restaurante... ¿De verdad, Sebastián? De todas maneras voy para allá ahora mismo.
Todos: - ¡¡¡DILE QUE SÍ!!!
Duclack: - Teo, tengo que marcharme ya. Es una urgencia.
Todos: - ¡Ohhhhhhhhhhhhhh!
Teo: - Pero...
Mariachi: - Tranquilo, muchacho... Usted lo intentó. ¿Le tocamos una última cancioncita para levantar ese ánimo?
Teo: - No, gracias, mejor que no... Espera, Duclack...
Teo: - ¿Qué sucede?
Duclack: - Es Pradito... Ha tenido una caída...
Teo: - ¿Pero cómo?
Duclack: - No sé... Estaba jugando...
 Duclack: - Al parecer se cayó de la camarera...
Duclack: - ¡Ay, estoy muy nerviosa! ¡Tengo que ir al hospital! Sebastián está en urgencias con ella... ¡Cogeré un taxi!
 Teo: - Un momento... Pago y te acompaño.
Sumiller: - Gracias y buenas noches, señores... Repitan cuando gusten.
Teo: - (Después del palo que me habéis metido, dudo que repita)...
Duclack: - ¡Oh, la limusina!
Teo: - Sí...  Tenía otra sorpresa para cuando saliéramos de aquí... La limusina nos está esperando... Se la volví a pedir a mi amigo el organizador de bodas...
Camarera: - ¿Se van juntos?
Cliente: - ¡En limusina y todo!
Camarera: - Después de dejarlo así... No se ha dignado a darle ni un sí... Menudo estómago...
Cliente: - Deja que no veo bien...
Camarera: - A ver si le agarra la mano.
Cliente: - Es una pena. Hacen una bonita pareja.

Teo: - Espera... Te abro la puerta...
Duclack: - Gracias...
Teo: - Lo que no entiendo es que hace Pradito todavía en tu casa... ¿No estaba con las monjas?
Duclack: - Es lo que trataba de decirte... Se va a quedar conmigo... de momento...
Teo: - Bueno, no pasa nada. Nos ha estropeado un poco la noche... Pero tendremos muchas más...
Duclack: - Por favor, en estos momentos sólo puedo pensar en Pradito...
Teo: - Hemos recorrido todas las urgencias de los hospitales y centros de salud... Debiste llamar primero para ver en cuál estaban...
Duclack: - No me lo cogía... Espera tengo un whatsappclick de Sebastian: "Ya estamos en casa".
Duclack: - Se ve luz...
Teo: - ¿Más tranquila ya? Seguro que está perfectamente. Los niños son de goma y esa niña es muy dura al haber estado siempre tan asilvestrada.
Duclack: - Sí...
Teo: - ¿Quieres que pase?
Duclack: - No, mejor aprovecha la limusina para volver a casa. Mañana te llamo.
Teo: - Vale...
Duclack: - Menuda noche...
Duclack: - ¿Está bien? ¡Su brazo!
Sebastián: - Shhhh, se acaba de quedar dormida...
Sebastián: - Quince días de escayola...
Pradito: - ¡Duclack, ya estás aquí!
Duclack: - Sí, mi niña. ¿Te duele mucho?
Pradito: - No, me han puesto una venda muy chula. Sebastián me ha dibujado a Tinger...
Sebastián: - Ya va siendo hora de dormir  ¿No le parece, señorita?...
Pradito: - Sí... Tengo mucho sueño...
Duclack: - Mañana me cuentas todo con pelos y señales.
Sebastian: - ¡Aupa!...
Duclack: - ¿Te ayudo a acostarla?
Sebastián: - Tranquila, usted vaya a descansar también. No tiene muy buena cara.
Duclack: - Pretendo adoptar a una niña y soy una pésima madre... ¡Hip!... La dejo abandonada y se parte el brazo... Y mientras el mariachi cantándome esa odiosa canción... ¡Hip!
Sebastián: - ¿Se encuentra bien, capitana?
Duclack: - ¡Me encuentro genial! ¡Un restaurante entero con mariachis incluidos me ha jaleado para que dijera que sí! ¡He deseado que me tragara la tierra! Jamás había pasado más vergüenza! ¡Pero a Teo le da más vergüenza que pida agua mineral en un restaurante! ¿Tú lo entiendes? ¡Hip!...
Duclack: - ¡AH! ¡Y dice que me haga la depilación láser! ¿La de depilación láser? ¡Que él se la hace! ... Pues vale, muy bien para él... ¡Pero no me digas lo que tengo o no tengo que hacerme! ¿Y ese tinte rubio que se ha echado? ¿Acaso le he dicho yo que no se tiña? ¡NO! ¡Hip!.. Porque yo respeto lo que él se haga. Siempre he respetado a todo el mundo. Quizás ese es mi problema.¡Hip! Si hasta usa más cremas y potingues que yo... que digo que yo, ¡más incluso que hasta Lilu! ¡Hip! Y se gasta en ropa ni se sabe... Pero vamos, que me importa poco. Cada uno con su dinero hace lo que quiere. ¡Pero déjame a mí vivir en paz!... ¡Hip! Jamás un click me ha dicho cómo cuidarme ni había sentido que se preocupara más de su cuerpo que yo! ¡HIP! 
Sebastián: - Esto será mejor que lo deje... Ya ha bebido suficiente por hoy.
Duclack: - ¡Pero si es ron! ¡No te avergüences! ¿Si te pido agua te vas a avergonzar tú también?
Duclack: - ¡Y este pelo fuera! ¡Estoy hasta el moño de esforzarme en estar perfecta para él. Es agotador... Los tacones me han hecho los pies polvo y yo ahí aguantando...
Sebastián: - ¿Ha roto su MP3?...
Duclack: - Un pequeño accidente... ¡Cómo el de mi niña!... ¡Ay, mi niña! ¡Se ha roto el brazo! Sebastián, ¿soy una mala madre?
Sebastián:- No...
Duclack: - ¡Dime la verdad, por favor!... Porque tú eres perfecto y sabes hacer todo pero yo...
Sebastián: - Usted está aún empezando pero tiene dotes de una gran madre.
Duclack: - Siéntate conmigo, Sebastián... Te voy a contar una cosa. De clack a click...
Duclack: - Si una clack sale contigo un par de meses, no le pidas matrimonio en un restaurante lleno... Y sobre todo nada de mariachis... ¿Tienes novia?
Sebastián: - No..
Duclack: - ¿Pero te has enamorado alguna vez?
Sebastián: - Sí... enamorado sí que estoy... pero es algo imposible... No creo además que vuelva a tener novia despué de lo de la Juani...
Duclack: - Pues si alguna vez la tienes, conócela bien antes de pedirle matrimonio... Pero sobre todo no intentes cambiarla a tu manera y semejanza... No sé... Preocúpate por lo que le gusta. No pases de ella si te intenta contar algo ni pidas por ella en el restaurante... ¡Eso está muy feo! Y escúchala, leñe...
Sebastián: - Lo haré... Si alguna vez la tengo...
Duclack: - Córcholis... Tengo ganas de llorar... Mi vida es un desastre...¿Por qué todos los clicks me salen mal? ¿Y ahora qué le digo yo? Espera una respuesta... ¡Me estoy agobiando!
Sebastián: - Capitana, es mejor que se acueste. Y por favor, no beba más...
Duclack: - Gracias, Sebastián... Eres un buen click... ¡Y muy guapo!... ¿Nunca te lo había dicho? ¿A qué no? Cuando te contraté, debo confesarte que eso te dio muchos puntos, jeje. ¡Hip! Sus también te dio el visto bueno en cuanto te vio y eso que antes me había dicho que contratara a un señor mayor.  Pero hoy en día... me gustaría haberte contratado con los ojos vendados.... Tienes muchas más cualidades que te hacen mucho más grande que una cara bonita.
Duclack: -  Ggggggrr... ¡Huy! Esas son mis tripas, jejeje. ¡Perdona! Mucho restaurante fino pero... ¡Qué hambre tengo! No he comido nada. ¡Ay! ¡Qué me caigo!
Sebastián: - La tengo... Mientras yo esté cerca, nunca caerá...
Duclack: - ¡Ay, qué mareo! ¿Has traído más barriles de vino? Veo muchos más...
Sebastián: - Está demasiado mal para bajar las escaleras...
Sebastián: - Venga por aquí... Hoy dormirá mejor en mi cuarto...
Duclack: - ¿Me vas a meter en tu cama, Sebastián? ¡Hip! No es mala manera de terminar el día... ¡Hip!
Sebastián: - Enseguida le traigo su pijama...
Duclack: - Zzzz... zzZ... ZZZ...
Sebastián: - Bueno... yo dormiré abajo en el sofá...
Sebastián: - Ainsss... Capitana...
                                                         FIN

2 comentarios:

  1. Divertidísima entrada, lo que me he reído con Duclack borrachilla jajaja. En primer lugar cuando piden y parece que es Teo el que lo piensa todo por ella, y encima, le reprocha pedir agua. Conmigo tendría que haber topado. Yo siempre pido agua en el bar cuando voy a desayunar jajaja. Los mariachis cantando no tiene desperdicio, con esas canciones tan clásicas jajaja. Duclack no sabía dónde meterse, pobre, menudo corte. Todo el mundo se queda mirando y cuchicheando sobre ellos. La llamada del accidente de Pradito, aunque es terrible y hubiese sido mejor que no sucediese, le salva de ese momento tan incómodo. Encima, le esperaba una limusina. El hombre puso todo su esfuerzo para que saliese bien, pero está claro que no podía ser. No me gusta nada de nada. Cuando Duclack se emborracha, cuenta muchas verdades, aunque algunas son sobre Sebastián, que se habrá sorprendido con lo de que es guapo, ha descubierto que ella y Sus se decantaron por él al ser tan guapo jajajaja, aunque luego como ella misma reconoce, es mucho más que una cara bonita. El detallito de la escayola, con el dibujo de Tinger que le dibuja Sebastian es precioso. Duclack es una gran madre y ella no se da cuenta. Se desvive por Pradito, lo deja todo por ella. Sale corriendo, sin importarle nada, solamente su bienestar. Es una gran madre, Sebastián también lo sabe. Por cierto, es muy bueno, la deja dormir en su cuarto y él se acuesta en el sofá. Incluso le pone el pijama. Menudo enredo, pero me da que Teo no se rendirá y seguirá "molestando". ¡¡¡Que sigaaa!!! Me he leído los capítulos con muchísimas ganas.

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  2. Jajajajajaja. Gracias por comentar como siempre, Dani. ¡Qué haria sin ti! Me alegra que te haya hecho reír.

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